Pasará una década detrás de barrotes por traficar drogas

La marihuana se decomisó en enero de 2021, en la parroquia Jibiruche, del cantón Espíndola.

La Policía hizo público el decomiso de la droga. (fotografía de archivo)
La Policía hizo público el decomiso de la droga. (fotografía de archivo)

Del aparente tráfico ilícito de 144 mil 330 gramos de peso bruto de marihuana que, el domingo 10 de enero de 2021, decomisó la Unidad de Inteligencia de Antinarcóticos con Coordinación Europea (Uiace), de la Dirección Nacional de Antinarcóticos (DNA), de la Policía de Ecuador, el Tribunal Penal de Loja encontró culpable a José T. J. y lo sentenció a 10 años de cárcel.

La audiencia de juzgamiento de José T. J. fue el lunes 13 y martes 14 de diciembre del año que fenece. En la misma la Fiscalía a cargo de la investigación proporcionó a los jueces del Tribunal Penal las evidencias que los policías de la Dirección Nacional de Antinarcóticos obtuvieron durante la investigación, que, a los uniformados de esa unidad, les tomaría alrededor de 10 meses.

143 paquetes de marihuana

Eduardo Pérez Flores, con rango de coronel, hace 11 meses comandante de la zona siete de la Policía de El Oro, Loja y Zamora Chinchipe, hizo público el operativo que en el cual los policías de la Dirección Nacional de Antinarcóticos incautaron 143 paquetes de marihuana, en un barrio de la parroquia Jibiruche, del cantón Espíndola, de la provincia de Loja, que limita con Perú, país sudamericano.

«Se ha desarticulado una organización narcodelictiva que tenía como centro de operaciones varios cantones de la provincia de Loja, en donde se acopiaban sustancias catalogadas y sujetas a fiscalización, para luego llevarlas al territorio de la República de Perú», develaba hace 11 meses el ahora excomandante Pérez Flores, quien indicó que los 143 paquetes de la droga se distribuyeron en 15 bultos.

Droga era almacenada

Eduardo Pérez Flores indicaba que los bultos que contenían la droga habrían ingresado por los pasos irregulares que existen en las provincias del norte de Ecuador, para de ahí transportarlos vía terrestre hacia la ciudad de Loja, en donde el alcaloide sería almacenado por un tiempo, para, después, trasladarlos a los países de Perú y Chile, en Sudamérica.