
Mientras en la ciudad de Loja, este sábado, 15 de marzo de 2025, la ciudadanía reclama agua, el alcalde Franco Quezada y los concejales se fueron a la parroquia Jimbilla, del cantón y provincia de Loja, a reunirse en una denominada sesión extraordinaria de Cabildo. Allí, la administración municipal realizó ofertas.
Lo hizo al Gobierno Parroquial.
En la parroquia lojana, los habitantes escucharon roces entre el burgomaestre y los ediles que solicitaron más de una vez a la autoridad “punto de orden”, en tanto que, en la urbe lojana, los habitantes suplican al Municipio el envío de tanqueros para el aprovisionamiento del líquido vital.
Cabe destacar que en los diferentes barrios el agua falta por más de una semana, situación que preocupa a todos porque, sobre todo, no existe un cronograma de distribución y los vehículos llegan repentinamente, lo cual origina confusión en los moradores.
Jorge Cuenca, presidente de la ciudadela Época, manifiesta que como directiva se coordina con el Municipio de Loja la dotación de agua, pero, lamentablemente, no hay un cronograma establecido y tampoco una comunicación efectiva por parte de la entidad.
Sixto Eugenio Alvarado, presidente de las Juntas de Desarrollo Barrial (JDB), expresa que, hace tiempo, se planteó al alcalde un plan de contingencia efectivo para solucionar el problema de cortes de agua, como el que se vive al momento desde hace más de una semana.
La idea, señala el dirigente, que tanqueros de diferentes entidades estatales, abastezcan a los barrios, pero ello no se da. Este viernes, 14 de marzo, se volvió a insistir en el trazado de un calendario de visitas, igualmente, no ha habido respuesta.
“Esto es una desorganización total”, expresa Sixto Alvarado, al tiempo revela que, ante no la atención de la entidad municipal, algunos dirigentes han pedido la ayuda a cuerpos de Bomberos de la provincia. Uno de ellos, de Gonzanamá, envió su tanquero a dotar agua. Un carro de Catamayo brindó el servicio este sábado, 15 de marzo de 2025, a la ciudadela Época.