Deceso súbito de joven lojano origina hondo pesar en la ciudadanía lojana

Estuvo a punto de graduarse de médico veterinario zootecnista, así como tenía previsto inaugurar su propia clínica. Hoy es el sepelio.

La capilla ardiente se levantó en su domicilio, en el barrio lojano Consacola.
La capilla ardiente se levantó en su domicilio, en el barrio lojano Consacola.

Consternación originó en sus familiares, amigos, compañeros y allegados la noticia del súbito fallecimiento de Héctor Fernando Quezada Tenesaca, de 25 años de edad, suscitado en la madrugada del último sábado, 12 de agosto de 2023, en el barrio La Tebaida, al sur de la ciudad de Loja, donde fue localizado por las autoridades de Policía su cuerpo.

Una buena persona

Amable, querido, divertido, independiente, responsable y muy comprometido con su carrera y futura profesión: médico veterinario zootecnista, trabajando muy duro cada día para mejorar dentro de ese ámbito. Así lo califican sus amigos a Héctor Fernando, quien estuvo a días de graduarse en la Universidad Nacional de Loja (UNL).

Cuentan que su deseo fue, tras obtener su título profesional, montar su propia clínica veterinaria, proyecto que estuvo en marcha, faltando únicamente la fecha para inaugurar el local, hasta que la muerte repentina echó por la borda su meta.

“Esperamos justicia y que no queden en la impunidad y sin castigo las personas que apagaron su vida llena de metas, planes y sueños”, exhortan sus amigos, al tiempo reiteran que el deceso de Héctor Fernando les suscitó un vacío inmenso.

Sus estudios primarios y secundarios los cursó en la Unidad Educativa Fiscomisional San Francisco de Asís, de la ciudad de Loja. El exrector del establecimiento, Juan Luna Rengel, lo recuerda como un joven inquieto, pero muy deseoso de superarse y continuar adelante, llevándolo a ingresar a la UNL, donde estaba concluyendo su preparación académica.

Le gustaba ayudar

Héctor Fernando Quezada Tenesaca, según opina el hoy rector de la Unidad Educativa Lauro Guerrero, tenía un espíritu de humildad y le gustaba siempre ayudar.

Los restos mortales están siendo velados en el barrio Consacola, al noroccidente de la ciudad, del redondel El Libro, de Carigán, unas dos cuadras más arriba. La misa de cuerpo presente se celebrará este lunes, 14 de agosto de 2023, a las 13:00, en la iglesia Perpetuo Socorro y posteriormente se procederá a su inhumación en el Parque de los recuerdos.

VOZ

“Tenía un espíritu de humildad y le gustaba siempre ayudar”,

Juan Luna Rengel, exrector de la UEF San Francisco de Asís