En medio de un estado de excepción en el que no podemos reunirnos ni asociarnos se decretó un feriado de tres días que sumados al fin de semana permitieron que todas las familias viajen en virtud de sus posibilidades a diferentes lugares turísticos o a reencuentros familiares.
El lado positivo es que se reactivó la economía de muchos hogares que se vieron beneficiados por la presencia de varias familias. Esperemos que los contagios de la covid-19 no se incrementen y que las reuniones familiares y sociales no tengan como efecto la pérdida de seres humanos.
Luego de tantos meses en los que muchos negocios quebraron, ya era necesario que los diferentes locales comerciales y emprendimientos tengan la oportunidad de tener demanda a sus productos.
El incremento del costo de gasolina no limitó el reencuentro de los familiares y amigos que viajaron desde diferentes puntos del Ecuador que como siempre en día de difuntos se evidenció en el país.
La disciplina social respecto a medidas de seguridad debe continuar; solo el uso de mascarillas y alcohol en las manos en forma permanente nos permitirá evitar contagios masivos y quienes presenten temperatura o síntomas de peligro, no deben frecuentar lugares públicos para así cuidarnos todos.
Es tiempo de apoyarnos adquiriendo los productos de primera necesidad a los campesinos, no a las multinacionales, los platos típicos, apoyemos a nuestros amigos o vecinos en sus diferentes emprendimientos.
Manuel Salinas Ordóñez
masalord@hotmail.com