Probablemente alguna vez hemos escuchado aquella frase de ¨Una acción vale más que mil palabras¨, pues yo difiero, creo que es al revés, una palabra puede ser aquella que determine más de mil acciones.
De niña muchas veces escuché a mi familia decir “Ten cuidado con lo que dices, las palabras tienen poder” y en lo personal creo que es de las frases más acertadas, una simple palabra puede cambiar el destino.
Para entrar en contexto, empecemos con las palabras que a simple vista pueden parecer las más elementales, el sí y el no, aunque parezca ilógico y hasta un tanto cómico una simple sílaba puede determinar tu destino.
Ahora tocando un tema más complejo como el amor, no hay frase más icónica para definir este sentimiento que un ´´te amo´´, pero no nos damos cuenta cuan significativa puede ser aquella frase, no son solo palabras, son sentimientos, aquel ´´te amo´´ puede cambiar por completo una relación, puede ser ese siguiente paso que necesitaban para saber que era la persona correcta.
Una palabra puede ser tan poderosa como para influir en la vida de alguien más, un ejemplo muy simple son los apodos, a veces lo decimos con cariño, a veces con burla o a veces por simple costumbre, pero aquel apodo puede ser determinante en la autoestima de alguien.
Lo irónico es que muchas veces cuando nos enfrentamos a alguna situación culpamos a la suerte, pero alguna vez han analizado las palabras que pronunciaron previo a verse embarcados en aquella situación, porque yo sí, y por ilógico que suene muchas veces me doy cuenta que una simple palabra lo pudo haber cambiado todo.