La primera vuelta electoral estuvo signada por algunas peculiaridades.
La polarización, trabajada en favor de correístas y anticorreístas (canalizada por la derecha «ligth» neoliberal), obtuvo el 88,17% del electorado. Los votos nulos alcanzaron el 6,8 % y los blancos el 2,16 %, es decir, 1.009.322 de personas rechazaron los diversos binomios votando nulo o blanco.
Sobresale el dato del VOTO NULO, que se situó debajo de quienes entraron al balotaje, es decir, se ubicó en tercer lugar
Con seguridad, la confrontación en la segunda vuelta, sin propuestas políticas creíbles y coherentes; con ataques personales y de denuncias mutuas sobre actos de corrupción y de supuestos respaldos de mafias delincuenciales; conducirá al incremento del rechazo a ADN y RC5.
Este fenómeno de repulsión es legítimo, pues ANULAR EL VOTO no favorece ni a Noboa ni a Correa; es una corriente de desencanto popular que crece cuando utilizan y manipulan la política para sus intereses particulares.
En esta corriente de desencanto y rechazo popular se encuentran las organizaciones sociales y sindicales, que han sufrido la división y persecución del correísmo; los defensores de la naturaleza, la ecología, los Derechos Humanos, que confluyen en acciones antisistema; los jóvenes que vieron frustrada su aspiración universitaria durante la “década robada»; los profesionales desempleados que ven truncado su deseo de tener ingresos laborales fijos; las amas de casa que ven el grado de afección a sus hijos ya sea por la tabla del consumo de la droga así como por el accionar de la delincuencia organizada.
Están, también, los decepcionados que respaldaron a Noboa en el 2023, sean éstos de pensamiento liberal o meramente anticorreístas viscerales. Son personas que consideran que Noboa no sabe cumplir su palabra, que es igual o peor de mentiroso y corrupto que Correa.
Son parte los profesionales del derecho, defensores de la democracia y opositores a cualquier expresión de autoritarismo y violación de la Carta Magna. Noboa viene haciendo tabla rasa de la Constitución igual que lo hizo Correa.
Asimismo, son parte de esta corriente, los partidos políticos de izquierda, que se han resistido las políticas del correísmo y noboísmo.
Lo claro de esta posición es que no hay mal menor, ambos no podrán resolver los problemas del país, ya que tienen como prioridad defender al capital por encima del ser humano.
Remo Cornejo Luque
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