El Consorcio de Transportistas Urbanos no prevé incrementar más unidades en las horas pico.
Unos padres de familia mostraron su preocupación por la decisión de retomar las actividades presenciales a partir del lunes 7 de febrero de 2022, puesto que, consideran que en el tema de transporte podría haber contagios, problemas para trasladarse y falta de atención en la infraestructura de las instituciones.
“No todas las instituciones están condiciones óptimas como para mantener el distanciamiento de 2.25 metros cuadrados y también en el transporte urbano está limitado con aforo”, describe una madre de familia, quién también recrimina que se esté obligando a que los estudiantes vayan a las aulas.
De acuerdo al Comité de Operaciones de Emergencia (COE-Nacional) quienes se educan en el régimen Sierra y Amazonía solo hay asistencia voluntaria para quienes están de primero a séptimo grados en instituciones educativas clasificadas como urbanas.
Para ofertar la presencialidad de manera normal deberán estar vacunados contra el Covid-19 el 85% de los alumnos con las dos dosis.
Aforo buses
De acuerdo a las resoluciones del COE-Cantonal el transporte público debe circular con el número de pasajeros que vayan sentados. Esta disposición estaría vigente hasta el domingo 6 de febrero y se reunirán nuevamente para mantener o cambiar las disposiciones para la semana siguiente.
Sobre el tema dialogamos con el gerente del Consorcio de Transportistas Ciudad de Loja, Diego Guerrero Ordoñez, quién cuenta que el aforo, de acuerdo al COE-Nacional debe ser del 50% y el COE-Cantonal lo consolidó en el 30%.
“El COE-cantonal no acata las disposiciones a nivel nacional”, recrimina e insiste en que continúan afectados por la subida del combustible y que no se considera un aumento en el valor del pasaje.
Adicional refiere que se debería ubicar personal de control en las paradas para evitar que se supere el número de personas que exige el COE en las unidades, “los conductores no pueden bajar a las personas, peor en horas pico cuando los usuarios necesariamente deben trasladarse”, afirma.
Ante esto ve con preocupación lo que pueda suceder la semana siguiente cuando los estudiantes quieran trasladarse a sus instituciones, “peor se va a poder controlar, por lo que, el Municipio de Loja debe ser consecuente para poder circular”, refiere.
Diego Guerrero descarta que se pueda ubicar más unidades en las horas pico, “porque la tarifa no permite cubrir el elevado valor del combustible”, finaliza.
CLAVE
Desde el lunes 7 de febrero los alumnos retornan a las aulas.