En la historia de Latinoamérica, el nombre de Matilde Hidalgo Navarro resuena con fuerza y reverencia. Su labor en pro de la equidad y su valentía para romper los estereotipos de género nos inspiran. Sin embargo, es crucial reconocer que antes de ella, algunas mujeres también emprendieron esta noble batalla, aunque su camino quedó truncado, de ahí que estas damas, aunque invisibles en muchos relatos históricos, plantaron las semillas del cambio y sirvieron de inspiración para Matilde, quien emergió como una verdadera líder, ya que su grandeza radica en esa tenacidad inquebrantable, en su capacidad para superar los obstáculos más peliagudos y en el apoyo incondicional de su familia, quienes fueron un pilar fundamental para su éxito.
La trayectoria de Matilde Hidalgo estuvo plagada de barreras y prejuicios. En cada etapa de su vida, enfrentó resistencia y discriminación. Desde su ingreso a la escuela secundaria hasta su carrera en medicina y su participación política, cada paso fue una batalla contra una sociedad patriarcal que intentaba mantener a las mujeres en un estado de sumisión. Sin embargo, Matilde nunca se dejó vencer. Su determinación y su espíritu indomable le permitieron superar cada obstáculo y demostrar que las mujeres eran igualmente capaces y merecedoras de oportunidades.
Dentro de los hitos históricos que el país elogió días atrás, se encuentran los 100 años del voto femenino en Latinoamérica, y como no podía ser de otra manera, esto motivó a varias comunidades, organizaciones, fundaciones, entidades, colectivos, para organizar una serie de eventos alusivos, a través de actividades académicas y culturales. Y es que el legado de Matilde Hidalgo es vasto y perdurable, su lucha abrió las puertas para que innumerables mujeres siguieran sus pasos y contribuyeran al desarrollo de Ecuador y Latinoamérica en diversas áreas. Su vida y obra nos inspiran a luchar por nuestros derechos y a no rendirnos ante la adversidad. Además, su historia nos recuerda la importancia del apoyo familiar y comunitario en esta lucha por la equidad de género.
Lucía Margarita Figueroa Robles
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