Las raíces de San Sebastián en la historia y cultura de Loja

La Iglesia, ubicada en la emblemática Plaza de San Sebastián en Loja, tiene raíces profundas que se remontan a los inicios de la ciudad. Cada 20 de enero se celebra una fiesta en honor al santo patrono.

La Iglesia de San Sebastián se sitúa en una de las plazas más simbólicas de Loja, la Plaza de San Sebastián o Plaza de la Independencia, como también es conocida.
La Iglesia de San Sebastián se sitúa en una de las plazas más simbólicas de Loja, la Plaza de San Sebastián o Plaza de la Independencia, como también es conocida.

En la obra Diócesis de la Inmaculada Concepción de Loja, el P. Carlos Ortiz, relata que su historia comienza con una ermita construida en 1577, bajo la iniciativa de Juan de Morales, entonces cura y vicario de la parroquia. Esta ermita, conocida como “La Ermita del Señor de San Sebastián,” ocupaba el mismo sitio donde hoy se levanta el templo parroquial. 

Camino a la construcción de la iglesia

La designación de San Sebastián como el santo patrono de la ciudad de Loja está asociada a la fundación de la ciudad por Alonso de Mercadillo, quien, según el investigador Alfonso Anda Aguirre, probablemente la estableció el 20 de enero, día de San Sebastián. 

Esto dio lugar a que se construyera una ermita en honor al santo, la cual servía como un punto de encuentro para los habitantes de la ciudad en sus primeras etapas. Desde entonces, la figura de San Sebastián ha sido venerada en Loja, y su templo ha sido testigo de momentos históricos y religiosos cruciales para la comunidad.

Según lo escrito en la obra Diócesis de la Inmaculada Concepción de Loja, tomo I, Con el paso de los años, la estructura original de la ermita se transformó. En 1705, se creó oficialmente la Parroquia Eclesiástica de San Sebastián, y hacia 1776, cuando se formó la diócesis de Cuenca, San Sebastián fue reconocida como una parroquia urbana en Loja.

Iglesia de San Lourdes

Desde 1705, el Convenio de San Sebastián ya funcionaba en casas adaptadas y el templo, en capillas pequeñas. Cuando se creó la diócesis de Cuenca, en 1776, San Sebastián es mencionada como parroquia eclesiástica urbana en la ciudad de Loja.

En 1874, Felipe Eliseo Álvarez Sánchez presbítero y párroco en ese entonces, inició la construcción del actual templo. Los costos eran altos y recursos pocos. La obra se realizó con grandes sacrificios, recogiendo limosnas, organizando repetidos bazares en toda la provincia y en el norte del Perú. 

El primer Obispo de Loja, José María Massiá y Vidiella, consagró solemnemente el nuevo templo el 9 de diciembre de 1894. La iglesia fue edificada en honor a Nuestra Señora de Lourdes, por lo que inicialmente llevaba ese nombre. Sin embargo, a partir de la construcción del nuevo templo, comenzó a llamarse iglesia de San Sebastián.

Esta iglesia es una de las más antiguas de la ciudad, junto a la parroquia de San Juan Bautista de El Valle.
Esta iglesia es una de las más antiguas de la ciudad, junto a la parroquia de San Juan Bautista de El Valle.

El legado de Eliseo Álvarez Sánchez

Eliseo Álvarez dejó una marca en la parroquia de San Sebastián. Durante sus más de cuatro décadas de servicio, no solo construyó el templo, sino que también fue un pilar de la comunidad, promoviendo la devoción y estableciendo una escuela parroquial para los niños. 

Según relata Efraín Borrero, cronista de Loja, se dice que Eliseo Álvarez, hizo una importante contribución económica al instituir una feria anual al 8 de diciembre en honor a la Virgen Inmaculada. Este evento se convirtió en una celebración significativa para la economía local.

Torre de San Sebastián

La Plaza de la Independencia es, la cuna de la libertad del pueblo de Loja, donde se dio el grito de independencia el 18 de noviembre de 1820. Así lo narra en el libro Diócesis de la Inmaculada Concepción de Loja.

La torre tiene una altura de 32 metros y destaca como una obra  monumental de ingeniería aerodinámica. Está coronada por un reloj público de cuatro esferas.
La torre tiene una altura de 32 metros y destaca como una obra  monumental de ingeniería aerodinámica. Está coronada por un reloj público de cuatro esferas.

Por esa razón, el entonces alcalde, Alfredo Mora Reyes, dispuso en 1957, la construcción de la llamada Torre de San Sebastián, concebida como un monumento en homenaje a la independencia de Loja,

La torre tiene una altura de 32 metros, sigue el estile art decó y destaca como una obra monumental de ingeniería aerodinámica. Está coronada por un reloj público de cuatro esferas, y en su base se puede apreciar grandes murales representativos de la ciudad y provincia de Loja, según lo expresa Efraín Borrero.

Adicional a la iglesia San Sebastián 

A un costado de la Iglesia de San Sebastián se encuentra el Mercado de San Sebastián, una estructura tradicional que fue construida en 1948 y que ha servido como punto de comercio.

En el centro de la plaza se encuentra también una glorieta que ha sido escenario de eventos culturales a lo largo de los años, incluidos los conocidos “Jueves culturales”, que actualmente ya no lo realizan.

PARA SABER

En 1996, el templo de San Sebastián fue declarado Santuario Eucarístico Diocesano por Monseñor Hugolino Cerasuolo, IX Obispo de Loja. Esta distinción buscaba fomentar la devoción al Santísimo Sacramento del Altar y convertir a San Sebastián en un punto de referencia para los fieles de la diócesis. 

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