En 2004, Howard Gardner lanzaba su teoría que postulaba que había ocho inteligencias, aunque después añadió la inteligencia espiritual y luego se ha hablado de otras más.
Hoy se comenta sobre otra inteligencia, la inteligencia contextual, propuesta por Tarun Khanna, profesor de Harvard, que la define así: “es la habilidad para entender los límites de nuestro conocimiento sabiendo adaptarlo a un ambiente diferente de aquel en el que se desarrolló”. Es decir, la inteligencia contextual necesita y, a la vez, nos ayuda a tener un discernimiento claro de la realidad; a conocer la realidad de una manera holística, global, y no por partes inconexas; hallar relaciones entre las circunstancias y entre los hechos; a recopilar una amplia información cronológica. Por otro lado, se evita actuar basados en suposiciones u opiniones, y nos permite adaptarnos con éxito a realidades nuevas o nuevas situaciones reales o inventadas.
Hay algunas operaciones mentales que nos ayudan a obtener esta inteligencia y también a aplicarla debidamente. He aquí algunas:
1, Análisis (división de un todo en sus partes) de los hechos, de los procesos, de los componentes.
2, Síntesis (reunión de las partes en el todo) de los elementos intervinientes para tener una visión global, holística.
3, Clasificación de las partes del entorno o contexto.
4, Categorización y jerarquización de las clases o subconjuntos que intervienen en la situación.
5, Comparación de las partes o de los contextos para ver las analogías y las diferencias, buscando causas y efectos.
6, Concreción, abstracción, inducción, deducción con el objeto de teorizar sobre los resultados encontrados.
7, Creación y propuesta de solución al problema o cuestionamiento.
En todo caso, ¡una inteligencia que abarca muchos aspectos y muy interesante!
Carlos Enrique Correa Jaramillo
cecorrea4@gmail.com