La Asamblea Nacional, el cadalso de la nueva política

11 juicios políticos, 4 destituciones, y 1 censura a una exministra, es el resultado aparentemente más “exitoso” de la hoy cuestionada Asamblea Nacional. Cuestionada justamente por in-visibilizarse en los momentos más álgidos de la protesta social, pero evidenciarse en los actos más observados de la corrupción.
Incluso este procedimiento jurisdiccional (juicio político) hoy ejercido por la función legislativa, también asiste a esa valoración desgastada de la credibilidad de la Asamblea Nacional, y probablemente sea porque éste acto político-judicial, al parecer se ha convertido en el Cadalso Político de algunos preclaros funcionarios.
La última invitada al Patíbulo Legislativo, como ya conocemos fue la Exministra de Gobierno, y más allá de la evidente mayoría que decidió destituir y censurar su gestión, hay que recordar que un año atrás ya se había archivado un proceso similar, así como el proceso contra el exministro de finanzas, o aquel contra la presidenta del CNE, entre otros que por razones justificadas no han llegado al pleno.
La pregunta es, ¿Cómo podemos confiar en la independencia fiscalizadora de la función legislativa? Si inconcusamente se replican las prácticas que se juraron combatir de gobiernos anteriores. Responden a un llamado de arriba o acaso todavía existe alguien imbuido que define el “Pollice verso” como en época de gladiadores; o tal vez las voluntades legislativas aún siguen el cauce de los intereses particulares.
En tal razón, no se cuestiona a la Asamblea Nacional por ejecutar su potestad legal, sino por NO ejercerla cuando SÍ debiera. Estamos a dos meses de poder cambiar eso, el voto es una herramienta.

Jorge Ochoa Astudillo
socjorgeochoaa@gmail.com