Como homenaje a la tierra más bella de la tierra, les dejo parte del poema, escrito por mi tío abuelo Manuel Agustín Aguirre, nacido en Loja en 1903, al que título:
‘Río Zamora’
Con tu tejado de vidrio eras mi patio y mi casa:
toda mi infancia se asoma a las ventanas de agua.
Golpeando la piedra dura mi madre suspira y canta;
y entre sus manos resuena las campanitas de agua.
El cielo sobre el jabón, sus pies desnudos resbala,
le crecen barbas de espuma a la carita de agua.
Sobre las piedras sonoras brilla la brisa de agua,
yo tiendo la ropa y pienso que es como tender el alba,
mientras en mi corazón mueve sus dedos el agua.
En el aire los guijarros vuelan batiendo las alas: mueve
su parpado gris y abre los ojos, el agua.
Y cuando sobre la orilla la tarde loca se apaga,
de pie, una estrella se calza sus dos espuelitas de agua.
La voz dulce de mi madre allí la tengo guardada,
como una piedrita azul en el anillo de agua.
Rio Zamora árbol líquido, yo busco nido de espuma
en sus ramas y en mis manos y en mi sangre cantan
mil pájaros de agua.
Cuando me doy el lujo de caminar por la orilla de nuestro hermoso Rio Zamora, cruzando la bella y castiza, me detengo un rato, respiro profundo y repito pausadamente las palabras de este nostálgico poema y un automático ¡Viva mi Loja!