En estas elecciones lideran tendencia tres posibles candidatos. Uno que reflejaría el volver a tiempos no tan distantes y que desde la trastienda sería dirigido por quien ya gobernó, gracias a que quien participa en la contienda por su tienda de campaña es un pobre títere que ni su círculo íntimo comprende su proceder u actuar en el escenario político, por otra parte está el ya no catalogado como perteneciente al sector de extrema derecha, debido a que su marketing político lo ha guiado a ser o tratar de mimetizarse en el pueblo ecuatoriano como otro más, especialmente en el populacho con un léxico poco apropiado para un posible mandatario con su ya que …, ¡Será tal vez la desesperación de que la data estadística no da un solo punto porcentual que sume a su ya decadente figura!, pese al apadrinamiento del felino que probablemente hacia sus adentros manifieste su crasa equivocación de respaldo y alicaimiento de su partido. Y por otra parte el ya reconocido perdedor en varias contiendas políticas, cada vez con más probabilidad de ganar en estas elecciones según encuestas y por boca de la comunidad que manifiesta estar cansada de todos menos de aquel que por ser ‘rich’, creen ¡no le interesaría saquear a un estado con respirador artificial!, será que tal vez el de adelante… adelante sea la salvación. O apostamos por un posible outsider, que si bien es cierto de la lista de candidatos ninguno tiene forja de un verdadero forastero, pero que posiblemente sus propuestas en tinta son mucho más centradas a una realidad que acusa medidas paliativas urgentes para reactivar la economía, salud, empleo, desmantelar la corrupción….