
Si evidencias los errores de RC en campaña, eres de Noboa o derechista. Si evidencias los errores de Noboa, eres correísta o izquierdoso. Si evidencias los aciertos de RC eres correísta o izquierdoso. Si evidencias los aciertos de Noboa, eres derechoso o neoliberal.
Ese es el problema de la política en el país, la visión maniquea de la política, es decir, de ver las cosas entre lo uno o lo otro, entre el bien y el mal dependiendo del gusto de tu candidato. Si no intentamos ver las cosas con objetividad, aciertos y errores, para corregir o mejorar, cada vez nos polarizamos más como sociedad.
Lo más peligroso en esta campaña electoral es la gente que cataloga de correísta a todo lo que no está de acuerdo a su forma de pensar desde la orilla de ADN, así como de elitista y liberal a todo aquello que no está de acuerdo a la orilla de RC. Hay que huir de esa gente.
Ambos candidatos y proyectos políticos tienen desventajas y también fortalezas, pero si solo vemos lo que queremos ver, solo se construye dogma y fanatismo, algo peligroso para cualquier democracia.
El maniqueísmo se da por:
1.-Simplificación cognitiva: Los seres humanos a menudo tienden a simplificar la información compleja para facilitar su comprensión.
2.-Necesidad de seguridad: Vivir en un mundo complejo y ambiguo puede generar ansiedad. La creación de un sistema de creencias maniqueo puede proporcionar una sensación de seguridad al ofrecer respuestas simples a preguntas complejas.
3.-Pensamiento tribal: La identificación con un grupo o tribu puede llevar a ver a otros grupos como enemigos o amenazas.
4.-Sesgo de confirmación: Las personas tienden a buscar información que confirme sus creencias preexistentes y a ignorar información que las desafíe. Esto puede llevar a una visión extremadamente polarizada del mundo.
6.-Simplificación política: En el ámbito político, a menudo se simplifican las posturas y se presentan como opciones binarias. Esto puede llevar a que las personas vean a un partido o ideología como completamente bueno y a la otra como completamente mala.
¿Qué hacer? Hay que educarnos críticamente, aprender a ver la escala de grises, es decir, todas las posibilidades, y madurar política y democráticamente.
Pablo Ruiz Aguirre
pabloruizaguirre@gmail.com