Arbolado urbano: beneficios y perjuicios

Los árboles de las ciudades son fundamentales en el sostenimiento de condiciones habitables dentro de un contexto construido, porque proveen servicios ecosistémicos como la regulación de temperaturas extremas, suministro de oxígeno, reducción de la resonancia del ruido, purificación del aire, infiltración del agua, provisión de sombra, refugio de fauna, atenuación de vientos fuertes, provisión de estética paisajística, entre otros.

En las ciudades el árbol es el arquetipo de la naturaleza, lo que le ha dado cierto estatus en la propensión de su cuidado y protección, no obstante es menester estar conscientes que, por las condiciones del constructo urbano, algunos árboles generan afectaciones relacionadas con la infraestructura, ocasionando veredas y carreteras dañadas por las raíces de ciertos árboles, desagües obstaculizados por la gran cantidad de hojas, cableados de energía eléctrica afectados y viviendas agrietadas por raíces.

Sin duda, los beneficios son exponencialmente superiores a los perjuicios, pero es necesario conocer que el verdadero desafío radica en que los ciudadanos, las instituciones competentes en la gestión ambiental, las autoridades de turno, logren una reflexión consensuada, con el fin de armonizar la relación naturaleza-sociedad y convertir las ciudades en espacios agradables para vivir. El primer paso es la elaboración de un inventario del arbolado urbano de las ciudades del Ecuador y con ello gestionar el riesgo mediante la implementación de ordenanzas.

Benjamín Ludeña Guamán

benjamin.ludena@gmail.com

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