Quilanga: el incendio redujo a cenizas el esfuerzo de 12 años de la familia Merchán-Salinas

El fuego le originó un daño que sobrepasa los 100 mil dólares. Perdió galpones, plantaciones de café, árboles frutales, eucalipto. Solicita condonación de la deuda.

La granja avícola quedó en su totalidad destruida. Alrededor de seis mil pollos murieron asfixiados.
La granja avícola quedó en su totalidad destruida. Alrededor de seis mil pollos murieron asfixiados.

El trabajo realizado durante varios años quedó reducido literalmente a cenizas. La familia Merchán-Salinas, propietaria de la granja avícola Don Miguel, fue arrebatada abruptamente de su bien por el incendio forestal que golpeó con fuerza a la parroquia San Antonio de las Aradas, del cantón Quilanga, en la provincia de Loja. La pérdida material sobrepasa los 100 mil dólares.

11 días de fuego

El flagelo, que consumió alrededor de ocho mil hectáreas en el cantón, inició el viernes, 23 de agosto de 2024, en el barrio Santa Rosa, de San Antonio de las Aradas, y de allí se extendió a otros lugares, incluso a la parroquia Fundochamba. Recién fue controlado el lunes, 2 de septiembre, tras 11 días de un incesante y destructor fuego. 

Al igual que a otros productores y habitantes de San Antonio de las Aradas, la tragedia llegó sin contemplación a la granja Don Miguel. Su propietario, Rómmel Efrén Merchán Merchán, cuenta que las llamas contaminaron las instalaciones, a eso de las 13:50, del miércoles 28 de agosto de 2024. De nada sirvieron los esfuerzos de su esposa, Carmen Salinas Jaramillo, y sus tres hijos que lucharon a brazo partido contra el siniestro que, finalmente, terminó derrotándolos.

Es que difícil controlar y aniquilar al incendio que venía alentado por la fuerza incontenible del viento que se cree golpeaba a unos 95 kilómetros por hora. El fuego fue devastando todo lo que encontró a su paso: dos galpones con seis mil pollos en total, luego atacó a las plantaciones de café, de frutales, a los árboles de eucalipto, entre otras especies, incluida la vivienda de la familia Merchán-Salinas. 

Un nuevo golpe

La familia, en la pandemia del coronavirus que brotó en marzo de 2020, ya fue golpeada también, pero su afán de salir adelante hizo que acudiera, especialmente sus tres hijos, a refinanciar un crédito para reactivar la granja avícola Don Miguel. Así fue hasta que el incendio de los 11 días le arrebató todo.

Rómmel Efrén Merchán anuncia que la familia tiene previsto emprender en la parte agrícola, especialmente en la siembra de café, aunque espera que las autoridades, miembros de la mesa técnica: prefecto Mario Mancino, la gobernadora, Alexandra Monserrate Jara Minga, BanEcuador, ministerios de Agricultura, de Trabajo, entre otros, cumplan con sus ofertas de ayuda para los perjudicados por el incendio forestal. Estuvieron presentes en la parroquia el miércoles, 4 de septiembre.

Condonación de la deuda

El pedido es la condonación del crédito que, en su caso, adeuda 60 mil dólares. Dice que la gobernadora escuchó el planteamiento y aspira que curse sus buenos oficios a las instancias correspondientes porque, según expresa, no puede ser que la granja haya sido consumida por las llamas en pocas horas, luego de ocho años de continua actividad, incluso daba trabajo ocasional a la gente de la zona en el período de cosecha del café, a cuya labor le dedicó la familia 12 años.

  • VOZ

Si todo va bien, estimo que, en tres años, si hay buena lluvia, empezaremos a producir nuevamente el café”,

Desde hace 12 años venía produciendo café. El incendio afectó a 10 hectáreas, aparte de árboles frutales”,

Rómmel Merchán, propietario de la granja avícola Don Miguel

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