La democracia ha triunfado

Las ideologías no mueren, pero sí se transforman en las nuevas relaciones sociales que se crean con el transcurrir inexorable del tiempo. En ciertas coyunturas existen objetivos que se priorizan, como cuando hay que defender el sistema democrático, frente a la amenaza del retorno de un proyecto totalitario, corrupto y responsable del deterioro económico, político y moral de una sociedad.

El país pasó por una situación similar en la elección del nuevo presidente de los ecuatorianos. No se enfrentaron las vertientes políticas tradicionales de la Izquierda y Derecha, sino quienes apoyamos la opción del fortalecimiento de las instituciones democráticas y los que pugnaron por restaurar un régimen autoritario, a órdenes de un caudillo que es prófugo de la justicia ecuatoriana.

Este 11 de abril será recordado como un día histórico; pues, Guillermo Lasso, con el apoyo de las fuerzas democráticas, logró lo que parecía improbable: derrotar en las urnas a Andrés Arauz, el candidato puesto a dedo por el expresidente Correa, para que sea su delfín en la restauración de un nuevo gobierno de la «revolución ciudadana».

Triunfó la democracia, pero la lucha por el cambio no ha terminado. Guillermo Lasso solo podrá sacar al país del estancamiento si todos arrimamos el hombro para lograr su desarrollo sostenible y la necesaria equidad social, en un marco de democracia, seguridad jurídica y pleno ejercicio de los derechos humanos.

Gustavo Ortiz Hidalgo

gortizhidalgo@yahoo.com