Conflicto palestino – israelí

La historia contemporánea de tensión en el Medio Oriente ha estado, en gran medida, ligada al conflicto palestino-israelí. Esta pugna de poder basada en disputas territoriales, políticas o religiosas, ha transformado el panorama geopolítico de la región e influido en las posturas de las principales potencias mundiales. El origen moderno del conflicto se remonta a la década de 1940, con el fin del Mandato Británico en Palestina y la posterior Declaración de Independencia de Israel en 1948. En respuesta, varios estados árabes se unieron en contra del recién formado Estado de Israel, lo que ha llevado a una serie de episodios de violencia y desentendimiento mutuo. Desde ese momento, las tensiones han sido una constante, con períodos de relativa calma y momentos de gran tensión, muerte y destrucción, como el actual.

La reciente e inesperada ofensiva a gran escala de Hamás ha desencadenado una respuesta militar sin precedente por parte de Israel. Los sistemas de seguridad israelíes fueron sorprendidos por la brutalidad del lanzamiento de miles de misiles e incursiones armadas desde Palestina contra objetivos militares y civiles. Las causas de las acciones bélicas podrían estar relacionadas con algunas teorías: Israel ha comenzado a reestablecer sus relaciones diplomáticas con Arabia Saudita, algo que el grupo islamista palestino quiere impedir; por su parte, Hamás podría buscar con el conflicto reivindicar su posición de poder interno frente a Fatah. Además, al provocar una fuerte respuesta militar desde Israel, podría incitar una mayor escalada del conflicto involucrando a actores como Hezbolá en el Líbano o Irán, abriendo un escenario de guerra multifrontal. Ante este complejo panorama y el peligroso destino que corren las sociedades gobernadas, influenciadas o dirigidas por fundamentalismos, es necesario que la comunidad internacional redoble sus esfuerzos para encontrar una solución pacífica y duradera. De lo contrario, las tensiones podrían intensificarse, desencadenando consecuencias impredecibles para el frágil equilibrio global.

Santiago Pérez Samaniego

X: @satiagojperezs

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