El pedido de la entidad de terminación unilateral y una sanción millonaria quedan en nada. La compañía asegura que en unos siete meses la obra estará lista.
La Corte Provincial de Justicia de Santo Domingo de los Tsáchilas, mediante fallo, acaba de negar nuevamente la demanda interpuesta por la Prefectura de Loja en contra de la empresa Covipal y con ello los pedidos de sanciones y terminación unilateral del contrato quedan en nada, dándole la razón a la compañía.
Un antecedente
El lío jurídico, que inició hace aproximadamente siete meses, se dio luego que el prefecto de ese entonces y hoy asambleísta, Rafael Dávila, decidió por dar por terminado de manera unilateral el contrato con la constructora, a cargo de los trabajos de asfaltado de la vía Villonaco-Taquil-Chantaco-Chuquiribamba, de aproximadamente 40 kilómetros de longitud.
A las 15:30 del lunes, 29 de mayo de 2023, el juez de la Unidad Penal de Santo Domingo de los Tsáchilas resolvió aceptar la acción de protección presentada por la compañía constructora Covipal, respecto a la decisión del entonces prefecto Dávila, quien, a través del abogado de la entidad, apeló la sentencia.
En ese espacio, los habitantes, cansados de no ver los trabajos finalizados, empezaron a presionar y conformaron una agrupación, desde la cual no han dejado de luchar hasta conseguir su objetivo: tener la vía debidamente asfaltada.
Entrega de la obra
Hasta que la Corte de Santo Domingo de los Tsáchilas vuelve a dar la razón a la empresa Covipal y con ello, sin impedimento legal alguno, continuará los trabajos en la vía que, a decir del propietario, Santiago Eduardo Oviedo Moreano, nunca dejaron de hacerlo y anuncia que, en alrededor de siete meses, la obra estará debidamente concluida.
Santiago Oviedo comenta que el problema tuvo su origen en un mal informe entregado por parte de la fiscalización y la administración del contrato que hicieron caer en un error al prefecto de ese entonces, Dávila, que procedió a notificar, pese a los argumentos de Covipal respecto a los trabajos.
Dado el último fallo, la Prefectura deberá cancelar las planillas que están pendientes que ascienden a alrededor de 850 mil dólares, de los trabajos realizados anteriormente, así como la compañía ya no cancelará la multa de más siete millones de dólares que solicitaba el entonces prefecto Rafael Dávila.
Rechaza actitud de funcionario
El directivo dice que no hay vencedores ni vencidos y que hay que concluir lo antes posible la obra que beneficiará a las parroquias del noroccidente, asimismo, resalta el espíritu de lucha y gestión de los moradores que tuvieron que pagar la mala decisión que, en un momento, tomó la Prefectura, a través del Departamento Jurídico, encabezado “por el doctor Jhon Mora” que no permitió “ponernos de acuerdo entre seres humanos y ecuatorianos…”, señala.
PARA SABER
El monto de la obra asciende a alrededor de 12 millones de dólares, de los cuales han sido cancelados cinco millones.