Llegó hace unas cuatro semanas. Todos la alimentan. Es juguetona y le gusta visitar las oficinas.
Una perrita, color crema, mezcla de las razas mestiza y french poodle, tiene ahora como protectora a toda la Universidad Técnica Particular de Loja (UTPL). Llegó hace aproximadamente cuatro semanas. Allí, en pocos días, se ganó el cariño de todos. No le faltan los alimentos.
Nadie la reclama
Santiago Ochoa, catedrático de la entidad, expresa que no se sabe si tiene un hogar y que, durante este tiempo, se ha buscado a sus dueños, sin embargo, nadie reclama a la mascotita que hoy en día es la consentida de la comunidad universitaria: docentes, alumnos, empleados y trabajadores, que le prodiga el alimento y el cuidado necesarios.
Es muy juguetona, corre por el césped y siempre está contenta. Es una usuaria constante de las piletas. Allí, todas las mañanas, se da un buen chapuzón, sin importarle el agua fría, luego de lo cual recibe su comida.
Otra de sus ‘actividades’ del día es visitar las oficinas de las diferentes unidades académicas de la UTPL, donde mueve la colita a todos; otras veces juega en el campus con los estudiantes que le han tomado mucho afecto. No se puede determinar su edad.
Santiago Ochoa anuncia que pronto la llevarán al veterinario para el tema vacunas, desparasitación e incluso se ha iniciado una campaña para buscarle un nombre y que se quede, definitivamente, en la institución porque “todo el mundo está preocupado por la mascotita”.
La otra cara de la medalla
Como hay gente que maltrata a los animalitos, de diferentes formas, y que, en virtud de ello, ya hay una norma que castiga severamente, también hay sensibilidad y el don de la protección, resumido, esta vez, en la Alma Máter particular.
PARA SABER
Apareció en el centro de estudios superiores hace unas cuatro semanas.