En Jimbilla, según los concejales, no se ejecutan obras, pese a estar presupuestadas y que siguen las ofertas de campaña. Alcalde advierte estar dispuesto a cambiar a su equipo.
Las observaciones de los concejales al alcalde, Franco Quezada Montesinos, esta vez, se trasladaron a la parroquia Jimbilla, del cantón y provincia de Loja, en donde, en presencia de vocales del Gobierno Parroquial y los habitantes de esa zona, hubo nuevamente roces de las autoridades cantonales.
Cambian el terno por ropa informal
Conocimiento en segundo debate del proyecto de ordenanza que determina la ruta de pregones, desfiles, y la presentación de los proyectos planificados y en ejecución del Gobierno Parroquial, fueron los dos puntos del orden del día de la sesión extraordinaria convocada por el burgomaestre en Jimbilla, el último sábado, 15 de marzo de 2025.
Los concejales, el alcalde y los jefes departamentales acudieron a la sesión en traje informal, hasta con boinas y gorras, dejando atrás los ternos, las corbatas y los zapatos brillantes, que suelen lucir en el imponente Salón del Cabildo lojano.
En la sesión, el presidente del Gobierno Parroquial, Lauro Antonio Abrigo Guamán, tras agradecer al Cabildo por acudir a la parroquia, hizo públicas varias necesidades, persistentes a lo largo y ancho de los siete barrios de Jimbilla, aunque se mostró convencido de que en los dos años que le restan en el poder a la actual administración municipal se ejecuten.
Falta de mantenimiento
El dirigente también habló de la falta de mantenimiento en la línea de conducción del agua, tramo Imbana-Shucos, de alrededor de 10 kilómetros, y no descartó la posibilidad que la falta de agua en la ciudad se deba al deterioro de la infraestructura, incluso, reveló que en Shucos hay unos tubos abandonados sin prestar servicio alguno.
El concejal Edwin Miguel Castillo, tras la exposición de necesidades del dirigente parroquial, increpó al alcalde Quezada recordándole que el cuerpo colegiado, el 9 de noviembre de 2023, le aprobó una reforma presupuestaria para obras de alcantarillado, proyecto turístico en la quebrada de Shucos, ejecución de baterías sanitarías, una cubierta en el barrio Machala.
“En verdad, siento vergüenza estar aquí, señor alcalde, pido cumpla lo que el Cabildo le aprobó, aspiro que esta vez sí se concrete lo que viene a ofrecer”, expresó, al tiempo dijo que Jimbilla está abandonada y que ni siquiera servicio de telefonía móvil tiene.
Escuchar la voz ciudadana
El concejal Lenin Gabriel Cuenca Mendieta, en su intervención, tampoco ocultó su preocupación por el tema obras, aunque se concentró en las sesiones que se ejecutan en las parroquias, planteando que en estas participen con voz también los presidentes barriales, los vocales, entre otros sectores, “siempre y cuando lo hagan con respeto” o también “que vengan a agradecer por las obras que se ejecuten”.
El edil Pablo Aníbal Quiñónez Riofrío le dijo al alcalde que la época de campaña concluyó y que las ofertas ya no caben, haciendo alusión a las expresiones de la autoridad que el Municipio ejecutaría obras en Jimbilla. “Ahora debería mostrarse realidades, hechos concretos, pero de eso no hay nada”, criticó y señaló que tres proyectos fueron aprobados a favor de esa parroquia por un valor aproximado de 156 mil dólares, pero “ninguno de ellos se construyó en 2024”.
Iván Ludeña Astudillo, a su turno, reclamó que la actual administración no está ejecutando obras y que algo pasa al interior e insistió que llame la atención a sus colaboradores que más bien “lo hacen quedar mal (…). Ya los ofrecimientos pasaron y estamos en época de ejecución. Dos años que no se ha construido nada”, precisó.
Una advertencia del alcalde
Santiago Erráez Veintimilla señaló que le hubiera gustado ir a Jimbilla y ver obras construidas y no “solo ofrecimientos” porque ya en el período del entonces alcalde, Jorge Bailón Abad, se habló de trabajos para la parroquia y “recién ahora ponemos estudios y la verdad que da vergüenza cuando vamos casi ya dos años y “recién estamos con estudios”. Exhortó a cumplir con la parroquia lojana.
El alcalde, Franco Quezada Montesinos, dijo que no ofrece obras a Jimbilla, sino que estas constan en un plan de trabajo y que hará esfuerzos para que se concreten. También advirtió que, si un integrante de su equipo de trabajo no está cumpliendo o actuando honestamente en los procedimientos, lo cambiará “con todo gusto”.
- VOZ
También podemos realizar una sesión ordinaria, un día sábado, en una de las parroquias”,
Franco Quezada Montesinos, alcalde de Loja
En los siete barrios de la parroquia Jimbilla hay muchas necesidades”,
Lauro Antonio Abrigo Guamán, presidente del Gobierno Parroquial de Jimbilla
Señor alcalde, llame la atención a sus colaboradores que lo hacen quedar mal a usted”,
Iván Ludeña Astudillo