La periodista Karina Añazco dice que le dispusieron que se aplicara la vacuna

La periodista lojana asegura que no hubo abuso de confianza, de autoridad o que obligó a hacerlo. Dice que está tranquila.

La comunicadora cuenta que cumplió todo el proceso, al igual que lo hace el resto de gente, como registro, chequeo, entre otros.
La comunicadora cuenta que cumplió todo el proceso, al igual que lo hace el resto de gente, como registro, chequeo, entre otros.

La periodista lojana, Karina Alexandra Añazco Campoverde, quien venía desempeñando las funciones de directora de Comunicación del Hospital de Especialidades Carlos Andrade Marín (HCAM), del Seguro Social, de Quito, manifiesta que le dispusieron que se aplicara la vacuna contra el Covid-19 y que nunca pidió aquello y, por tanto, se encuentra tranquila.

Conocimiento y destitución

Karina Añazco Campoverde fue el centro de la polémica este último fin de semana a escala nacional por haberse vacunado contra el virus, pese a no constar en los listados que manejan el Ministerio de Salud Pública (MSP) y el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS).  

El presidente del Consejo Directivo del IESS, Jorge Wated Reshuan, vía Twitter, indicó que, tras conocer el caso, “se procedió a la inmediata destitución” de Karina Añazco, quien es oriunda de Puyango, de la provincia de Loja, y lleva 12 años en el ejercicio periodístico.

Su versión de los hechos

En declaraciones para este medio digital HORA32, cuenta que se avecinaban las jornadas de inmunización contra la pandemia y que, en su condición de integrante del equipo de Comunicación, tocaba ocuparse del tema logística de la actividad médica, entre otras tareas.

Previo a ello, dice que, dos días antes de la vacunación, a todos los funcionaros del ‘Carlos Andrade Marín’, incluida ella, les enviaron un enlace, donde les solicitaron informar la función, actividad que desarrollan, si han tenido alergias, Covid-19, entre otros. Esto fue el 19 de enero de 2021.

Agrega que, de acuerdo al pedido, aportó con toda la información e incluso por el mismo correo electrónico le llegó una constancia y al tiempo se le agradecía por la aceptación de la vacuna.

Luego, el 21 de enero, se dieron las jornadas de aplicación del biológico y que el listado de beneficiarios, según asegura, no lo manejaba el Departamento de Comunicación que lo dirigía.   

Ya al concluir la inmunización, a las 17:00, mientras coordinaba la cobertura del evento con un medio de comunicación allí presente, dice que quienes manejaban el listado llamaron a médicos y a otras personas, pero que, sin embargo, no se presentaron.

“Para poder cumplir con todo esto, llamaron a algunos médicos del Hospital y dentro de ellos dos no quisieron acceder a la vacuna, pero ésta tiene un tiempo límite desde que es extraída del congelador y luego se puede dañar”, expresa.

La periodista señala que, ante ello, se les dispuso que el médico ocupacional, el conductor y ella se colocaran en la fila para el proceso de aplicación del biológico.

Ya con ese pedido, cuenta que el chofer y ella formaron parte de la columna y que siguieron todo el proceso que cumplieron los otros beneficiarios, como registro, chequeo, entre otros, y finalmente, luego de pasar todos los filtros, los inyectaron.    

La comunicadora dice que se descontextualizó el tema y la presión mediática que se dio en redes sociales, “sin investigar cómo se suscitaron las cosas, creo que generó este conflicto y que acarreó hasta desprestigiar la imagen y la carrera de una persona que nada tenía que ver en el tema porque “nosotros no manejamos ni el listado ni el proceso, nos dispusieron que nos pongamos la vacuna y eso fue lo que se hizo”.

‘No me metí por la ventana’

Karina Añazco cree que la disposición de aplicarles la vacuna al conductor y a ella se dio por el hecho que, al ser funcionarios del HCAM y estar todo el tiempo allí, eran susceptibles de contagiarse con el virus, entonces, fueron tomados en cuenta para la vacunación y, a más de ello, se corría el riesgo que se dañaran los dos biológicos existentes.

“En ningún momento hubo abuso de confianza, de autoridad, o que me metí por la ventana u obligué a hacerlo, eso no ha pasado y creo que eso ya lo determinarán las autoridades”, precisa e insiste que le dispusieron que se la aplique y que dio cumplimiento a ello.

La periodista dice que se encuentra tranquila porque “no he hecho nada, no le he robado, ni he quitado de las manos la vacuna a alguien que se la estaba poniendo, seguí la directriz, me dijeron que me la colocara y eso hice, como lo hubiera hecho cualquier ciudadano si de por medio estaba que ese producto se iba a desperdiciar”.

LA VOZ

“Estoy tranquila porque no he matado a alguien, accedí al tema de la salud en una pandemia que nos tiene preocupados a todos”,

Karina Añazco, periodista lojana