
El tongo, el pacto, el acuerdo, como lo hayan denominado en el momento de su creación y suscripción… ha sido diseñado a la perfección; en él se advierte experiencia, sagacidad a la hora de redireccionar la estrategia y que esta cumpla con los objetivos planteados, esto es, llegar fortalecidos a las elecciones de 2025. No importa que en el camino se viole la Constitución o se vulneren los derechos de los ecuatorianos.
El presidente Jaime Roldós Aguilera, llamó a este tipo de triquiñuelas como: “el pacto de la regalada gana” y a su mentor, el ex presidente León Febres Cordero como: “el insolente recadero de la oligarquía”. Hoy estos hechos se vuelven a repetir teniendo como protagonistas al PSC, la RC5 y el partido de gobierno; con una particularidad muy notoria: el atropello burdo de la Constitución, coludidos todos para salvaguardar sus intereses, sin importar la vergüenza y la censura popular. El presidente Reagan decía: […] “La visión gubernamental de economía puede resumirse en unas cortas frases: si se mueve póngasele un impuesto. Si se sigue moviendo, regúlese, y si no se mueve más, otórguesele un subsidio.” […] Es decir, toda la capacidad de discernir, debatir o construir un pensamiento, una acción, una teoría… queda reducida a la reacción y no al pensamiento en sus diferentes manifestaciones.
El presidente de la República como colegislador y la Asamblea representada en esta mayoría de la “regalada gana” han inobservado normas constitucionales básicas que, de muto propio, deben ser parte de su técnica jurídica en la construcción de las leyes. Según nuestra Constitución la iniciativa para crear, modificar o suprimir impuestos recae exclusivamente en la competencia del presidente de la República; no obstante, siguiendo o, dicho con propiedad: “respetando las líneas del pacto”, han creado una situación de inseguridad e inestabilidad jurídica y económica que nos pasará factura a todos por igual. Por ello, bien dice Gilbert Keith Chesterton: […] “Si no logras desarrollar toda tu inteligencia, siempre te queda la opción de hacerte político.” […] Y frente a la cruda realidad que vivimos, estimo que esta opción ya la siguieron muchos de los que se hacen llamar los “padres de la patria”; para que esto cambie les deseamos: …buen viento… y buena mar.
Lenin Paladines Salvador
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